Hoy en el Centro de Vida recibimos una visita muy especial, un grupo de voluntarios de Hewlett Packard que ha estado comprometido con nuestra misión durante los últimos 5 años, tejiendo un vínculo fuerte con nuestra organización a través de su tiempo y generosidad.
Bajo el cálido sol de la jornada, estos voluntarios dedicaron su mañana a nuestros niños. Juntos, compartieron risas y aventuras en la resbaladiza pista jabonosa, donde la curiosidad de los más pequeños nos recordó los instantes de felicidad que podemos ofrecer a los más vulnerables. Después de la emocionante actividad llena de burbujas y diversión, el grupo de voluntarios en compañía del equipo de pedagogía , preparó brochetas de frutas, un gesto sencillo pero significativo.
Expresamos nuestra más profunda gratitud a los voluntarios de Hewlett Packard, su apoyo constante en beneficio de nuestros niños demuestra que la ayuda desinteresada es el mejor regalo.
En un mundo en el que la compasión y la generosidad a menudo se valoran más que nunca, estamos agradecidos por tener aliados como estos voluntarios que entienden que ayudar es fácil cuando lo hacemos juntos.