El día de ayer 30 beneficiarios del Comedor María es mi Madre y Casa de la Esperanza, de la Fundación Proyecto Unión, se aventuraron a descubrir un rincón especial de experiencias en un solo lugar.
Acompañados por Ciro Cortes, Coordinador de Casa de la Esperanza, dos practicantes de trabajo social de la Universidad Externado y el apoyo de integrantes de la fundación, nuestros queridos abuelitos visitaron las instalaciones de la Fundación Parque Jaime Duque. Para muchos, este viaje marcó la primera visita a un lugar que se revelaría como un entorno de varias temáticas que crearon asombro y admiración.
Entre risas y sorpresas, exploraron la reserva natural Bioparque Wakata, donde el majestuoso león, el hipopótamo y una sinfonía de animales cautivaron sus corazones, regalando momentos que recordarán por siempre. Al igual que el «Museo Jaime Duque», un recorrido por la historia impregnada de sueños. Aquí, en un espacio lleno de logros y dedicación, se destacó la colaboración continua con la Fundación Proyecto Unión. Un lazo que se forja desde hace muchos años, respaldando los programas que nutren las almas de aquellos que más lo necesitan.
«Para mí fue maravilloso, incluso puede ser el último lugar que visite, pero me voy contento», expresó con emoción uno de nuestros queridos beneficiarios, sintetizando la magnitud de este día inolvidable.
No podríamos cerrar este capítulo de gratitud sin mencionar a nuestros ángeles donantes, cuyas alas desplegadas de generosidad hicieron posible este viaje. Un agradecimiento especial al Parque Jaime Duque por donar as entradas y el almuerzo, igualmente a todos aquellos que con su apoyo constante hacen que estas experiencias se conviertan en una hermosa realidad.
Que estas vivencias continúen iluminando los días de nuestros valiosos adultos mayores, recordándonos que el legado más poderoso es el amor compartido.