Desde hace muchos años, los adultos mayores habitantes de calle, beneficiarios de la Fundación Proyecto Unión han venido recibiendo ayuda de parte de las damas voluntarias de la OPS y este año, a pesar de las circunstancias de la pandemia, no fue la excepción, ellas se lucieron para atender a los abuelitos con un almuerzo navideño.
En esta oportunidad la natilla, acompañada con buñuelo, regalos y una gran lechona fueron los ingredientes que le dieron apertura a la época de compartir, para celebrar la navidad a más de un centenar de abuelitos que asisten diariamente al Comedor María es mi Madre, ubicado en el centro de la capital. El espíritu navideño y los sentimientos de gratitud se sintieron en cada uno de los presentes quienes manifestaron su alegría con frases como: “Que Dios las bendiga por traer ese bocadito que tanto necesitamos, que nunca dejen de ser generosas”.
Gracias a las damas de la OPS por contribuir permanentemente con el bienestar de la población de adultos mayores que merece toda la atención y el cariño por parte de nuestra sociedad.