contagió a todos los presentes.
[/av_slide] [av_slide slide_type=’image’ id=’5638′ video=’http://’ mobile_image=» video_ratio=’16:9′ title=» link_apply=» link=’lightbox’ link_target=» video_controls=» video_mute=» video_loop=» video_autoplay=»] El mejor y más grande regalo
fue el poder compartir
con los niños del
Hogar Santa Rita de Cascia.
[/av_slide] [av_slide slide_type=’image’ id=’5635′ video=’http://’ mobile_image=» video_ratio=’16:9′ title=» link_apply=» link=’lightbox’ link_target=»] Samuel visitó a cada uno
de los niños de la fundación
y compartió un rato con ellos.
[/av_slide] [av_slide slide_type=’image’ id=’5637′ video=’http://’ mobile_image=» video_ratio=’16:9′ title=» link_apply=» link=’lightbox’ link_target=» video_controls=» video_mute=» video_loop=» video_autoplay=»] Samuel, su familia y amigos
que los acompañaron fortalecieron
el espíritu de solidaridad
y generosidad en esta fecha
tan especial para todos.
[/av_slide] [/av_slideshow] [av_textblock size=» font_color=» color=»] Como para muchos padres, cuando se acerca el momento de celebrar la Primera Comunión de sus hijos, se busca que este día sea inolvidable para ellos, que marque por el resto de sus vidas el verdadero significado de recibir este importante sacramento. Por ello, Bibiana Gálvez y Gabriel Martínez, los padres de Samuel, buscaron un lugar especial, donde la familia pudiera expresar los sentimientos de agradecimiento por todas las cosas recibidas en sus vidas y enseñarle a su hijo el verdadero valor de compartir, de ser generoso y solidario con quienes más lo necesitan, por eso escogieron el Hogar Santa Rita de Cascia de la Fundación Proyecto Unión.
Samuel, es considerado un regalo de Dios para la familia Martínez Gálvez, es el menor de tres hermanos en el hogar conformado por Bibiana y Gabriel, quienes después de tener a sus dos hijos mayores ya grandes, no esperaban la llegada de un tercer hijo, pero cuando la noticia llegó y los médicos alertaron a los padres acerca de los riesgos de salud que implicaría su nacimiento, fueron ellos quienes tomaron la decisión de seguir adelante con el embarazo y hoy día se sienten bendecidos y agradecidos de contar en sus vidas con el pequeño Samuel, un niño sano y feliz quien ya casi cumple 10 años y actualmente cursa tercero de primaria.
La celebración fue única e inolvidable, como lo dice Samuel: “fui el único que tuvo 63 niños invitados a mi fiesta” y que en vez de juguetes, recibió los corazones y la alegría de compartir con 63 niños, quienes presentan enfermedades de alta complejidad y en su mayoría fueron abandonados por sus padres. Los regalos que debían llevar los invitados consistían en donaciones en dinero o en especie orientadas a fortalecer la alimentación de los niños. El recordatorio fue una bella oración bendecida, alusiva al valor de la vida, que se encuentra adornando las cunas y camas del Hogar.
El saxofonista, acompañado por el guitarrista y los cantantes, visitaron con Samuel y los invitados cada una de las habitaciones del Hogar,compartiendo momentos maravillosos en ésta, una celebración con un sentido muy especial, que permitió enriquecer las vidas de Samuel y su familia, así como la de todos los asistentes a la celebración, quienes recordaron que no hay nada más grande y maravilloso que la vida, sobretodo cuando se vive la felicidad de compartir.
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