Existen actores, que aunque no son muy conocidos, han jugado un papel fundamental en la construcción de sueños. Cuando toda esta aventura comenzó, habían muchos retos y obstáculos que superar en el camino, poco a poco estos se fueron superando. La adquisición de un terreno, sumado a recursos económicos para la construcción de una Unidad Pediátrica que brindara servicios y tratamientos de alta calidad a niños con enfermedades complejas, en nuestro país, eran solo algunos de ellos.
Buscando hacer realidad este sueño, el Dr. Fernando Quintero, director de la Fundación Proyecto Unión acudió a McKinsey Colombia, para una obtener asesoría profesional y conocer cuánto dinero se necesitaba para la construcción de este gran proyecto que cambiará la vida de cientos de familias en nuestro país. Después de realizar un análisis financiero, la consultoría le comentó que eran necesarios cincuenta mil millones de pesos.
Para poder aterrizar cada vez más este sueño, se ideó un plan estratégico y creativo que ayudará al financiación del proyecto, de allí nació el Plan Chanchito. Esta novedosa estrategia consiste en una pequeña alcancía de cartón, fácil de armar, con la cara rosada de un chanchito y lo identifica una capa azul que le sirve para volar por todo el país, buscando la atención médica oportuna para niños enfermos de nuestro país.
Esta alcancía se ideó para ser llevada a la casa, colegio, universidad, empresas etc, una vez adoptado, solo es necesario llenarlo con billetes o monedas con el apoyo de la familia, amigos, compañeros de trabajo o estudio; una vez lleno, solo es necesario acercarse a una de las sedes de la fundación o llamar para ser recogido. Con $50.000 pesos en cada chanchito y un millón de amigos, ese sueño podría ser realidad!
En la Fundación Proyecto Unión, todas las donaciones merecen ser reconocidas y exaltadas. Por ello, las personas que deciden llevarse su chanchito, son fotografiadas con unas alas de ángeles que lo identifican como ángel donante. Una vez regrese el chanchito a nuestro hogar lleno de amor y generosidad, la cara de cada chanchito llevará el nombre del aportante y esta se ubicará en el mural especial donde estarán ese millón de amigos que se unieron para hacer realidad este gran sueño.
De esta forma, se puede evidenciar una vez más, que ayudar es muy sencillo, ya que con el pequeño aporte de muchas personas, se pueden lograr grandes cosas y en nuestro caso, grandes sueños, porque juntos alcanzamos más.