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el día que llegaron a su nuevo
hogar.
[/av_slide] [av_slide slide_type=’image’ id=’7411′ video=’//’ mobile_image=» fallback_link=’//’ video_ratio=’16:9′ title=» link_apply=» link=’lightbox’ link_target=» av-medium-font-size-title=» av-small-font-size-title=» av-mini-font-size-title=» av-medium-font-size=» av-small-font-size=» av-mini-font-size=» av_uid=’av-2uy07m’] Jorgelis y Juan Diego tomando un
paseo en las instalaciones de
Casa de los Ángeles.
[/av_slide] [av_slide slide_type=’image’ id=’7412′ video=’//’ mobile_image=» fallback_link=’//’ video_ratio=’16:9′ title=» link_apply=» link=’lightbox’ link_target=» av-medium-font-size-title=» av-small-font-size-title=» av-mini-font-size-title=» av-medium-font-size=» av-small-font-size=» av-mini-font-size=» av_uid=’av-5ks61u’ video_controls=» video_mute=» video_loop=» video_autoplay=»] Juan Diego disfruta los paseos
en bicicleta al aire libre.
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que cada día nos enseña
valentía.
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Jorgelis Escobar llegó a Colombia procedente de  Venezuela buscando un nuevo horizonte para ella y su hijo, teniendo en cuenta  la difícil situación por la que atraviesa el vecino país y lo complicado que puede ser tratar una grave enfermedad. Juan Diego, su pequeño hijo de 6 años fue diagnosticado con leucemia linfoide aguda y en su país recibió 6 meses de tratamiento médico gratuito, pero si quería continuar con el proceso sus padres debían empezar a pagar por las sesiones de quimioterapia.

Gracias a  la alianza de las  Fundaciones “Proyecto Unión” y  “Abraza un Sueño”, Jorgelis encontró en “Casa de los Ángeles”, el espacio que su hijo necesitaba para vivir, “intenté vivir en otros albergues en Bogotá pero la convivencia con el niño no fue fácil y en muchos lugares donde intentamos hospedarnos trataban mal a mi hijo”, así lo afirmó la madre de Juan Diego. Pero Proyecto Unión le abrió las puertas de su nueva sede en Tocancipá llamada “Casa de los Ángeles”, un hogar lejos de casa, rodeado de naturaleza,  que brinda alojamiento,  alimentación y acompañamiento a niños que padecen una difícil enfermedad y sus mamás mientras  adelantan  tratamiento médico.

El bienestar de Juan Diego es lo más importante para su madre, ella dice “ si mi hijo está cómodo, yo estoy cómoda, si mi hijo está feliz yo también lo estoy”. Esta mamá dedicada 100% al cuidado de su hijo, afirmó también que desde el momento en que  llegaron a Casa de los Ángeles, el niño se sintió  feliz y que cuando salen a citas médicas,  no quiere irse pues piensa que no va a volver a lo que hoy se convirtió en su nuevo hogar.

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